viernes, 4 de diciembre de 2009

Modulo GESTIC

El nuevo desafío de los equipos directivos de las escuelas: la gestión de las TIC en el proceso educativo, ¿algo nuevo? O ¿más de lo mismo?

Gestionar, tramitar, formalizar, determinar, establecer; todas acciones sinónimas que indican la necesidad de preparar adecuadamente el terreno para incorporar una innovación o bien para readecuar procesos ya existentes. Según define la real academia española (RAE) , gestionar significa: Hacer diligencias conducentes al logro de un negocio o de un deseo cualquiera. (Revisar en sitio Web: (http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=gestionar).
En toda actividad de cualquier índole, se debe gestionar el proceso a seguir que conducirá al logro del objetivo propuesto para dicha actividad. Las Instituciones que tienen como misión producir servicios masivos de gran calidad para la sociedad en general, cuentan con unidades o áreas especializadas en el tratamiento de la gestión estratégica. En la actualidad, es común observar a empresas, entidades gubernamentales y ONG con programas de control de gestión estratégica que regulen todo su quehacer. El ámbito educativo no ha quedado fuera. Preservando su esencia de institución socializadora de los sujetos que forman parte de una sociedad, la educación y el sistema educativo completo debe también saber gestionar sus procesos. Enmarcados en la sociedad de la información, en la que el componente TIC es el protagonista, las escuelas se ven enfrentadas con un nuevo desafío: combinar eficientemente los recursos tecnológicos disponibles con los procesos educativos. No se trata simplemente de reconocer su existencia y luego su importancia como herramienta que potencia las prácticas docentes y los aprendizajes de los alumnos, sino también se trata de elaborar un plan de integración de las TIC en las escuelas, en su planificación curricular, en la comunidad educativa, en lo cotidiano. Para ello, la gestión de las TIC es el primer paso. Como lo demuestra la literatura de las experiencias internacionales y latinoamericanas respecto a la inclusión de las tecnologías en los establecimientos educativos, la primera fase estuvo centrada en la provisión de infraestructura; en lenguaje de los informáticos: ”de los tarros”. Aunque parezca algo poco complejo, la introducción de un nuevo elemento – las máquinas- provocó cambios en la cultura de las escuelas, dando paso a una nueva cultura educativa denominada cultural TIC. “El desafío es que la introducción de las TIC llegue a producir cambios en las culturas institucionales y en los sujetos. Por lo tanto, la incorporación de estas tecnologías en las escuelas debe pensarse como un proceso más amplio que la mera incorporación de herramientas de trabajo” (del Módulo: Gestión de las TIC en las instituciones, Tema: Gestión Organizacional de las TIC).
Una segunda fase es la preparación/capacitación de los sujetos que utilizarán las TIC en los procesos educativos. Es decir, la alfabetización digital. Para poderse manejar adecuadamente con las múltiples tecnologías de hardware y software que el mercado provee, es preciso potenciar el desarrollo de las competencias TIC que requieren dichos elementos. Con gran esfuerzo, en el Ministerio de Educación a través de Enlaces, centro de educación y tecnologías, se han identificado las competencias TIC docentes (para mayor información revisar el sitio Web: http://www.enlaces.cl/index.php?t=44&i=2&cc=1383&tm=2).
Por tanto, es otro aspecto que debe ser considerado dentro de la gestión de las TIC en las escuelas. Los docentes por lo general, no son “nativos digitales”, han crecido al margen de las tecnologías y han debido integrarlas de manera algo forzada a sus prácticas de enseñanza. “(…) los recursos necesarios para acceder a ese nuevo mundo tecnológico no solo requieren que las personas posean la tecnología y la formación técnica sino las destrezas intelectuales para usar la tecnología para lograr sus propios fines. Las TIC no son simples herramientas para utilizar sino procesos para ser desarrollados:” (Pérez, Paula y otros (2001): Aprendiendo de los pioneros. Una investigación de las mejores prácticas de la red Telar. En Marcelo Bonilla y Gilles Cliche editores (2001): Internet y Sociedad en América Latina y el Caribe, FLACSO Ecuador - IDRC, Quito, 2001). Son los equipos directivos quienes deben preocuparse por generar los espacios adecuadas para que sus docentes se capaciten en el uso efectivo de las TIC y de esta manera desarrollen las competencias TIC adecuadas. El esfuerzo de las iniciativas gubernamentales podría ser desaprovechado sin un trabajo en conjunto y responsable de parte de los equipos directivos de los establecimientos educacionales. ¿Es posible pensar que los equipos directivos también requieran de ciertas competencias para llevar a cabo este nuevo desafío que impone la integración de las TIC al proceso educativo? Sin duda, la respuesta más frecuente sería afirmativa. Sí. Los equipos directivos - y no solamente el director de una escuela- requieren de ciertas competencias que le permitan desarrollar un buen liderazgo en la gestión de las TIC en las aulas y en las comunidades educativas, “(…) a partir de estas experiencias se puso en evidencia la necesidad de que los equipos directivos cuenten con un marco de referencia respecto de la inclusión de las TIC en las escuelas. No se trata, por cierto, de que los directores sean expertos en tecnologías, sino de que puedan liderar los diferentes procesos que se desencadenan cuando las TIC llegan a las escuelas, de modo que éstas se encuadren dentro de un proceso de innovación que les dé sentido”. (Lugo, MaríaTeresa y Kelly, Valeria (2008): "La gestión de las TIC en las escuelas: el desafío de gestionar la innovación" (Extracto). En UNICEF – IIPEUNESCO (2008): Las TIC. Del aula a la agenda política. Buenos Aires."Las TIC: del aula a la agenda política" Co-publicación con UNICEF. 2008). El liderazgo resulta fundamental para llevar adelante la innovación pedagógica con uso de tecnologías de informática educativa. Asimismo, una gestión estratégica efectiva requiere de una planificación minuciosa que considera: dónde se colocará el equipamiento computacional, quiénes lo podrán utilizar, con qué frecuencia, en qué momentos de la jornada escolar, de qué manera se integrará a la planificación docente, entre otros. Ejemplo de lo anterior se recoge del texto de Mercedes López de Blas en su artículo: Las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) como apoyo a la innovación y al cambio: “ (…) Listado de necesidades en el colegio público Coloma: 1. elegir coordinador/a responsable, 2. elegir ubicación adecuada aula-TIC, 3. Estudio de formación necesaria Coordinador /a TIC y profesorado del centro, 4. Estudios de material software necesario según proyecto curricular existente: áreas y programas, 5. Estudios de horario de utilización aula TIC por los cursos. Programas. Alumnado. Profesorado, 6. Calendario de reuniones para organización-coordinación-preparación del uso del aula: puesta en práctica por alumnado y profesorado y evaluación procesal, 7. Informe-resumen anual del proceso” (HLópez de Blas, Mercedes (2005): "Las tecnologías de la información y la comunicación como apoyo a la innovación y al cambio". En Revista Electrónica iberoamericana sobre Calidad, Eficacia y Cambio en Educación. Vol.3. Nro.1.página 453-454)
Una tercera fase que puede mencionarse en este proceso de incorporación de TIC en las escuelas y que debe considerarse en su adecuada gestión, es el uso educativo de las mismas. No se da por cumplida la misión con el sólo hecho de incorporar infraestructura tecnológica, ni de capacitar a los docentes en su uso, sino, el desafío está en desarrollar políticas de informática educativa que apunten a la integración curricular de las TIC en el proceso de enseñanza aprendizaje. Teniendo ese horizonte, la gestión estratégica de las TIC cobra sentido y todos se alinean en pos de su consecución.

jueves, 3 de septiembre de 2009

Reflexiones Primer Módulo TTC

Luego de las lecturas de este módulo, puedo señalar algunas reflexiones como respuesta a las preguntas de "Perspectivas"
Podemos conocer desde nosotros mismos pero siempre vamos a constituirnos con la experencia del otro. Claramente el texto de Paul Watzlawick tiene una base antropológica que nos permite comprender que como seres humanos estamos interrelacionados en la sociedad. Si combinamos lo anterior con la aparición de la tecnología, como ámbito transversal a nuestro quehacer cotidiano, se complejiza la relación, ya que las bases que sustentan las teorías antropológicas no contemplaban las características inherentes a las TIC. Por lo tanto, la Red de máquinas inteligentes, superpone o traspasa los supuestos básicos del lenguaje y la interrelación humana. Pero, la labor está en nosotros, en resguardar nuestros límites y utilizar provechosamente la tecnología, en ámbitos como la educación.

domingo, 9 de agosto de 2009

Módulo: Bases y actualizaciones aplicadas

Sociedad y Tecnologías, ¿Antítesis o Complemento?

La aparición, evolución y progreso de las tecnologías han ejercido influencia en la sociedad y los seres humanos. Por sí mismas no poseen características positivas o negativas, sino que siempre se les debe considerar en un contexto, ya que surgen en y para un fin determinado. Son creadas por el Hombre y responde a una relación histórica del ser humano con el medio ambiente y es parte fundamental de nuestra humanidad (…) se conciben como creaciones culturales. (Tarasow, F y Pedregal, N, “Convergencia tecnológica”, pág 3). De lo anterior, se supone su uso y justamente del uso experimentado es que puede ser vista, como una consecuencia, su influencia en la sociedad.
Como bien es sabido, la sociedad como un entramado de individuos y sistemas económicos, políticos y culturales que interactúan entre sí, es compleja. Por lo tanto, la aparición y uso de la tecnología ciertamente tiene relación con el cambio social que se ha venido experimentando desde la década de los 70’ aproximadamente. De esta manera, el nuevo cambio histórico de la humanidad tiene como eje central la tecnología y sus alcances inimaginables.
Sin embargo, resulta fundamental en el análisis de este fenómeno, la apropiación de la tecnología. Este hecho, la apropiación por parte de los individuos, permite resignificar la tecnología en tanto medio o herramienta que aporta significativamente al desarrollo social. Una vez más se reafirma que la tecnología por sí misma no es buena ni mala, por lo mismo no ejerce efectos positivos ni negativos, sino que depende necesariamente del contexto en que se encuentre.
Para comprender más acabadamente esta idea, es necesario conocer dos conceptos atingentes al presente análisis. Muchos autores que han estudiado el tema en cuestión, concuerdan que en la sociedad, una de las principales consecuencias que se ha desprendido de la tecnología y su uso y apropiación, es la denominada revolución digital que se debe a la correlación de tres principales tecnologías: la digitalización, la informática y las telecomunicaciones; “la convergencia e interacción de tecnologías constituye el núcleo fundamental de la denominada revolución digital, en tanto diversos procesos y tecnologías que anteriormente funcionaban de manera aislada tienden a converger en procesos y dispositivos comunes. Una característica de las TIC es su tendencia a borrar los límites entre los dispositivos y sus funciones (teléfonos que se utilizan para hablar, escribir, agendar, etc.)” (Tarasow, F y Pedregal, N, “Convergencia tecnológica”, pág. 5). Paralelamente, y ligado a lo anterior, surge el concepto de Sociedad Red. Uno de los autores que empatiza con esta idea es Manuel Castell. En un artículo publicado el año 2001 expresa lo siguiente: ”Esta sociedad Red es la sociedad que yo analizo como una sociedad cuya estructura social está construida en torno a redes de información a partir de la tecnología de información microelectrónica estructurada en Internet. Pero Internet en ese sentido no es simplemente una tecnología; es el medio de comunicación que constituye la forma organizativa de nuestras sociedades, es el equivalente a lo que fue la factoría en la era industrial o la gran corporación en la era industrial. (…) lo que hace Internet es procesar la virtualidad y transformarla en nuestra realidad, constituyendo la sociedad red, que es la sociedad en que vivimos (Castells, M Internet y la Sociedad Red, 2001, http://tecnologiaedu.us.es/revistaslibros/castelss.htm).
Retomando la idea inicial de este artículo, se puede concluir que las tecnologías cuando son apropiadas por el ser humano para darles un uso significativo y que resulten ser un aporte a sus actividades cotidianas, la sociedad experimenta cambios y transformaciones. Tomando como ejemplo una tecnología ampliamente difundida y conocida por muchos, Internet, se puede concebir que este tipo de tecnología es un elemento que organiza la vida social, convirtiéndose en un referente para la construcción de identidad de los individuos, para el diseño de negocios, de políticas, etc. Ha transformado costumbres y ha potenciado nuevas formas de vida que responden a las necesidades de ciertos grupos. Hay un éxodo de lo público a lo privado, sin límites temporales ni geográficos. Centrándonos en el eje de este diplomado, la educación, el efecto de las tecnologías y específicamente Internet, se puede encontrar una disminución en la brecha de acceso (Internet), pero es necesario buscar una orientación de uso, un modelo que guíe y acompañe sus múltiples funcionalidades. Para que exista cierto control en los cambios sociales que provocan la aparición y uso de tecnologías, es importante en una primera fase conocer, comprender y apropiarse de éstas. Luego, es necesario analizar individualmente y colectivamente si los aportes que se suponían en un inicio significarían el uso de las tecnologías, efectivamente se han cumplido y que consecuencias ha dejado en los ámbitos sociales, culturales, económico y políticos.
La sociedad como tal y desde sus inicios, siempre ha ido cambiando y evolucionando a raíz de factores que han ido emergiendo y generando influencias en los sujetos que la componen. Hemos sobrellevado la revolución industrial, la revolución tecnológica y ahora, la segunda parte de la revolución de las TIC (tecnologías de la Información y Comunicación). Por lo tanto, como sociedad debemos comprender qué tipo de medios tecnológicos estamos generando y cuáles serán sus posibles alcances.



viernes, 31 de julio de 2009

Articulo del módulo enseñar y aprender con Tecnologías

Integración de las tecnologías en el proceso educativo. ¿Uso con Sentido o Sentido de Uso?

La pregunta generalizada que se hacen todos aquellos que de alguna u otra manera se vinculan con el mundo de la educación es: ¿cómo integrar las tecnologías al proceso de enseñanza y aprendizaje? Para poder dar una respuesta más o menos orientadora, se deben comprender los conceptos de tecnología, proceso de enseñanza y aprendizaje y, por último, tecnología educativa o informática educativa. De este modo, se abre un sin número de nociones y teorías que nos llevan a enfoques provenientes de sectores académicos diversos. Como el objetivo es poder aproximarnos a una idea de lo que es la integración de la tecnología al proceso educativo (entendido en un sentido amplio), es necesario ir revisando punto por punto para luego hacer una lectura integral.

De acuerdo a la literatura especializada en el mundo educativo, la tecnología es concebida como una serie de recursos digitales y dispositivos tecnológicos que de acuerdo a sus características pueden apoyar en -ciertas instancias y en cierta medida- los procesos de enseñanza y aprendizaje. Es así como los recursos digitales que apoyan lo educativo (considerando gestión escolar, gestión de aula y gestión curricular) pueden denominarse como recursos educativos. Todos ellos se usan en la enseñanza y el aprendizaje indistintamente si su origen haya o no contemplado un fin educativo. Sin embargo, y dado el avance de los expertos, hoy se cuenta con una nueva categoría de recursos digitales, son los llamados recursos curriculares. Éstos, a diferencia de los anteriormente mencionados, han sido diseñados con un objetivo claramente definido, un fin didáctico . Para una mayor comprensión de ambas categorías, ejemplos de recursos educativos son los clásicos medios de comunicación como la radio y la televisión; mientras que un software educativo pertenece al grupo de los recursos curriculares. Dada la relevancia del aporte de éstos últimos, es necesario profundizar en las principales características de estos recursos, ya que dependiendo de su funcionalidad será la elección o no de parte de los usuarios finales: los docentes. Cobra sentido asimilar y comprender que los recursos educativos y curriculares son un medio facilitador del proceso de enseñanza y aprendizaje. El desafío está en no permitir que se vuelvan un fin en si mismo. Para evitar lo anterior, muchos autores han contribuido con posibles clasificaciones de los recursos de acuerdo al uso que se pretenda otorgarles. Tomando como referencia los cinco tipos de aplicaciones de la informática en la enseñanza de Gros Salvat, se encuentran: “transmitir un determinado conocimiento, proporcionar el acceso a la información, permitir la creación de material, potenciar el uso de estrategias y habilidades, y proporcionar herramientas de comunicación” . Todos estos usos realizan un aporte significativo en el proceso educativo. El autor establece también cinco categorías de productos de acuerdo al tipo de programa informático posible: “programas instructivos: software educativo para diferentes áreas y niveles; programas vacíos: procesadores de textos, bases de datos, hojas de cálculo, diseño gráfico, programas para creación de páginas web, multimedia, etc.; programas para el desarrollo de habilidades y estrategias: juegos y simulaciones; programas de comunicación: correo electrónico, chats, news; y, programas de consulta y acceso a la información: enciclopedias multimedia y páginas web” . Comprendiendo lo anterior, surge el rol activo de los docentes en la planificación de la enseñanza. Es en este momento en que los recursos digitales educativos y curriculares adquieren relevancia y protagonismo. Si un docente no contempla su uso dentro de la programación (o planificación), probablemente no habrá integración curricular de la tecnología y, en consecuencia no encontraremos informática educativa. Los profesores deben planificar la enseñanza como parte de su quehacer docente (proceso de enseñanza aprendizaje). La planificación, en términos generales, se entiende como una prefiguración de la realidad que sirve para guiar la práctica. Y, específicamente en el tema educativo, “la acción de diseñar tiene como fin enriquecer, analizar y mejorar la tarea de enseñanza; debe servir para repensar la propia acción en términos prácticos. De esta acción de diseñar devienen los planes. Los planes son el producto que concreta, materializa, la reflexión sobre qué, cómo, cuándo y con qué estrategias asistir el aprendizaje de los alumnos. (…) El sentido de todo diseño es guiar la acción, de modo que lo valioso es la acción y no el diseño mismo. (…) Cualquier diseño de la enseñanza debe tomar en cuenta una serie de cuestiones o variables. Las variables con las que el docente puede trabajar para diseñar la enseñanza son: a) las metas, objetivos o expectativas de logro; b) la selección del/ de los contenidos/s; c) la organización y secuenciación del/de los contenidos/s; d) las tareas y actividades; e) la selección de materiales y recursos; f) la participación de los alumnos; g) la organización del escenario; h) la evaluación de los aprendizajes” . Planificar por tanto, implica una reflexión de qué se enseñará, cómo se hará este proceso, cuáles serán las actividades más adecuadas, qué rol tendrán los alumnos y cuáles son las prácticas docentes que se desplegarán en esta actividad. Volviendo a la idea anterior, conocer los recursos educativos actualmente disponibles permite a los profesores incluirlos en sus prácticas. Esta inclusión puede ir desde un apoyo para presentar un contenido curricular a través de una PPT, como también para propiciar el desarrollo de habilidades en los alumnos al contemplar actividades de investigación científica navegando por la web. La tecnología está al servicio de las necesidades del Hombre. Del mismo modo, la informática educativa está al servicio del proceso de enseñanza y aprendizaje. Tal como la revolución tecnológica provocó cambios en la vida cotidiana de la mayoría de sus usuarios, los recursos educativos y curriculares indicen en la diversificación de prácticas de los docentes y de la manera de aprender de los alumnos. El último punto de este artículo tiene relación con la evolución de la informática educativa. Con la velocidad de los cambios en la tecnología, y en particular de los recursos educativos (entiéndase en sentido amplio), consecuentemente se puede observar que programas como la enseñanza asistida por operador (EAO) han quedado atrás. Una de las razones que explica lo anterior, se debe a los principios que han guiado el diseño de estos programas, generalmente: teorías de aprendizaje, modelos instructivos y concepciones didácticas y metodológicas. Al evolucionar estas teorías y corrientes de pensamiento, van cambiando los diseños y desarrollos de recursos educativos digitales. Para ejemplificar la evolución de la informática educativa, entendida como disciplina que se encarga de estudiar la integración de la tecnología al ámbito educativo, es pertinente citar una iniciativa que ha impulsado el Ministerio de Educación de Chile a través de su Centro de Educación y Tecnología, Enlaces. A partir del 2008, se han diseñado Modelos de Informática Educativa (MIE), que en términos simples se definen como estrategias metodológicas o didácticas acompañadas de recursos TIC, a través de la cual se implementa el currículo buscando el logro de aprendizajes esperados, la apropiación por parte de los actores involucrados de los procesos desarrollados, considerando el contexto de los establecimientos educacionales . Aún en pleno desarrollo de estos modelos, es posible observar un primer acercamiento a la integración curricular de las tecnologías en el proceso educativo. Si recordamos la pregunta inserta en el título del presente artículo, ¿uso con sentido o sentido de uso? se podría concluir que en el ámbito educativo -complejo por ser dinámico y trabajar con docentes y alumnos y pertenecientes a establecimientos educacionales con contextos particulares-, es necesario tener respuesta para ambas interrogantes. Un uso con sentido de los recursos educativos digitales, implica considerarlos dentro de un determinado espacio, a partir de sus características particulares. Mientras que un sentido de uso nos remite a reflexionar qué es lo que se pretende enseñar y que se espera que aprendan los alumnos, por lo tanto, cuál es el rol de estos recursos en dicho dilema. Las claves para optar por una u otra respuesta –o tal vez ambas- están en lo que se ha expuesto anteriormente: considerar la esencia del proceso de enseñanza aprendizaje donde la planificación de la enseñanza determina el quehacer docente, y a la par, conocer (atributos) y reconocer (funcionalidades) qué recurso educativo digital es favorable a dicha planificación.

domingo, 28 de junio de 2009

Link a Portal Educativo

En este portal encontrarán un espacio que reune herramientas de apoyo al quehacer docente y educativo.

http://www.educarchile.cl/Portal.Base/Web/VerContenido.aspx?GUID=91eeab75-be01-48ff-b0e5-8e1cdecd9878&ID=54

domingo, 24 de mayo de 2009

Centro de Educación y Tecnologías, ENLACES

Les invito a recorrer esta página: www.enlaces.cl es el centro de Educación y Tecnologías del Ministerio de Educación de Chile, donde yo trabajo.
Ahí podrán conocer las principales políticas de informática educativa que se están diseñando para integrar las TIC al proceso de enseñanza aprendizaje.

Espero sus comentarios!

Bienvenida

Les doy la bienvenida a este espacio virtual de encuentro.
Se irá constituyendo con mi s ideas y con el aporte de ustedes, mis compañeros de la comisión 5.